Ruta circular que parte del parking de las cuevas de Sara. Desde allí subimos al monte Atxuria (758 m), también conocido como Peña Plata, Arxuria, Artxuria, o Archuria. Desde la cima
hay preciosas vistas del monte Larun, Peñas de Aya y gran parte de la costa vasco francesa. Posteriormente, bajamos hacia Zugarramurdi por la ruta de los contrabandistas y volvemos al punto de inicio.
Mapa y track GPS de la ruta a ATXURIA
A continuación, te dejamos la opción de DESCARGAR EL TRACK y ver CÓMO LLEGAR AL PUNTO DE PARTIDA.
Aconsejamos seguir el track en esta ruta, ya que hay varios puntos con bifurcaciones. En cualquier caso, intentaremos explicar el trayecto lo mejor posible 😉. Como decíamos al principio, este monte tiene diversas denominaciones al estar en la frontera entre Francia y España. Atxuria, Arxuria, Artxuria, Archuria o Peña Plata son formas válidas para referirse a la misma cima. Especialmente curiosa es la denominación de Peña Plata, denominación debida a las placas de mica que brillan al sol y le dan ese toque plateado. Caminaremos en parte por la conocida como ruta de los contrabandistas marcada por unas marcas de caballos rupestres.
Comenzamos esta preciosa ruta en el parking de las cuevas de Sara. Es un parking amplio por lo que no hay problema para aparcar. En esta ocasión, no visitamos las cuevas, ya que no estaban abiertas. Es una atracción turística interesante aunque no es gratis. Puedes consultar tarifas, horarios y más información en https://www.grottesdesare.fr/es/lezea_es.html .
Una vez dejado el coche en el parking, comenzamos a caminar bajando por la carretera unos pocos metros. A nuestra izquierda hay un desvío con un cartel indicador hacia Artxuria. Pasamos la valla y tomamos el sendero que sube por la derecha, con marcas amarillas y suelo escalonado.
Seguimos este sendero hasta salir a una bifurcación. Tal y como indica la pintura amarilla, giramos a la izquierda, subiendo. Ascendemos unos pocos metros, y volveremos a ver otro cruce de caminos. En este caso, las marcas amarillas nos indican que vayamos a la izquierda, pero no les haremos caso. Seguiremos recto hacia la borda que está junto al dolmen de Lapitzeta. Esta es una zona muy tranquila, con sombra y preciosos árboles entre rocas con musgo.

A partir de aquí, seguimos el sendero sin desviarnos del camino principal durante 1,5 km. En este tramo cruzaremos un pequeño arroyo y nos acompañará un precioso bosque. Cuando hayamos realizado ese kilómetro y medio, llegaremos a un poste indicativo, al que hay que estar atentos. Nos indica que abandonemos la pista principal, girando a la izquierda casi 180º. Esto nos hará entrar en una senda algo más estrecha, que baja ligeramente al principio.

Bajaremos, viendo Atxuria a nuestra izquierda. Llegaremos a un collado despejado y empezaremos a ascender por un camino más ancho. Seguiremos sin desviarnos por esta pista. A nuestra izquierda veremos una casa con paneles solares, y más adelante una borda. Tras pasar la borda, a los pocos metros, veremos un cercado con Atxuria a nuestra derecha. Justo ahí empezaremos a ascender paralelos a dicho cercado.

Este ascenso es picado, pero breve, por lo que calienta un poco las piernas, pero no las rompe 😅. Empezaremos caminando a la derecha del cercado y cuando termina, pasaremos a la izquierda del mismo. Esto nos hará llegar a una zona despejada, con preciosas vistas de Ibardin, Manttale, Jaizkibel o Peñas de Aya a nuestra izquierda. En frente crece imponente la cima de Atxuria. Pero no hay que preocuparse, el ascenso no es directo. Tomaremos un sendero por la derecha, antes de llegar a las rocas, que bordea todo el peñón, para ascenderlo de forma más ligera. Seguiremos esta senda hasta llegar a un pequeño cruce. Aquí giraremos a la izquierda, ascendiendo un poco más hasta un collado con un gran Karin, y unas vistas preciosas.

Desde este collado, la cima de Atxuria está a nuestra izquierda. Podemos ascender hasta la misma por la senda entre las rocas, o podemos ir por un sendero que las evita un poco, a la derecha de las mismas. Nosotros vamos por el medio de las rocas. Hay algo de pendiente, pero no es exagerada. Sí que es recomendable prestar atención a este tramo a la bajada, especialmente en días lluviosos, ya que la piedras podrían estar resbaladizas.
En cualquier caso, subimos, y llegamos hasta la cima, donde hay un pequeño pero característico buzón.

Aquí es muy tentador visitar los vertiginosos bordes de la cima, con paredes bastante verticales. Nosotros somos más prudentes, y preferimos limitarnos a disfrutar las vistas 😅. Especialmente espectacular es la panorámica de Larun y la costa vasco francesa.

Una vez disfrutadas las vistas, volvemos sobre nuestros pasos hasta el collado presidido por el gran Karin. Desde ahí, bajamos al sendero, y vamos hacia la izquierda, por el sendero marcado. Este sendero nos llevará directamente hasta el collado de Ibañeta. Aquí, un poste indicativo nos indicará el camino que debemos seguir, la PR dirección a Zugarramurdi.

Sin embargo, antes de seguir, podemos disfrutar de los dólmenes y cromlech que nos ofrece este collado. Se viene #dato 🤓. Aquí se erige una estación megalítica mixta, construida en las distintas Edades prehistóricas del Calcolítico, Bronce y del Hierro, lo que confirma la ocupación humana en dichas épocas. Son exponentes del rito de incineración los círculos de piedra o Mairu Hilarriak que al parecer datan del siglo VIII-VII A.C. y que se mantuvieron hasta el I. A.C. Se trata de cenotafios individuales, con cenizas de un difunto cada uno.
El dolmen de Ibañeta, junto con los de Sorohaundi, Etxeberriko ardiborda y Etxartea, nos muestra grandes sepulturas de de inhumación colectiva eregidas desde el VI al I. Milenio A.C. Estos son los más grandes, túmulos circulares de 6 a 12 m de diámetro y de 0,5 a 2 m de altura. Si te interesan estos monumentos megalíticos, quizás también te interese nuestra ruta por los Cromlech de Peñas de Aya.
Pero sigamos caminando. Como nos decía el poste giramos a la izquierda, por el camino hacia Zugarramurdi, adentrándonos en el bosque.

A partir de aquí, seguiremos la senda marcada. Al principio es un sendero de tierra, que cruza un pequeño arroyo por un pequeño puente hecho con pequeños troncos. Posteriormente, saldremos a una pista cementada, junto a una preciosa casa. Seguiremos descendiendo ligeramente por dicha pista, hasta llegar a un nuevo cartel. Esta señal nos indica que abandonemos la pista cementada, girando a la derecha hacia un sendero más estrecho que se dirige a Zugarramurdi.

Seguiremos este camino sin desviarnos. Especialmente tentador es un desvío marcado en amarillo junto a un gran roble, pero no debemos tomarlo. Permaneceremos en el camino más ancho. Esto nos hará llegar a otra pista cementada, donde giraremos a la izquierda. Desde aquí veremos Zugarramurdi, y el que quiera puede visitar este precioso pueblo. Nosotros continuamos por la pista cementada, que después estará asfaltada, y la seguiremos sin desviarnos durante 1,8 km. Este tramo coincide con la conocida como ruta de los contrabandistas y está marcada con imágenes de caballos rupestres. A los 1,8 km, veremos a nuestra derecha una salida a un sendero con baldosas de piedra. Lo tomaremos.

Esto nos adentrará en una sombría senda con varias indicaciones que nos informan sobre la flora que veremos mientras andamos. Seguimos caminando y llegaremos a una zona con cuevas. No son las principales cuevas, pero podemos acercarnos a curiosear.

Una vez vistas las cuevas, seguimos la senda, girando a la izquierda. Esto nos hará llegar a la carretera, donde también giraremos a la izquierda. Esta carretera llega hasta el parking, aunque para caminar más cómodamente, tomamos el sendero que sigue esta carretera de forma paralela, a la izquierda de la misma, junto a la cantera. Esto nos llevará de vuelta al parking en 500 m.
Y así finaliza esta preciosa ruta. Espero que te animes a hacerla, y en ese caso nos dejes un comentario contando tu experiencia. Un saludo y hasta la próxima ruta!